Programa Nacional de Estímulos Culturales 2025: ¿participar o no participar?

El Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes de Colombia ha anunciado la apertura de su Convocatoria de Estímulos 2025, una política que tiene como misión fortalecer y diversificar el panorama cultural colombiano. A través de diversas convocatorias, los proyectos presentados son evaluados por expertxs a nivel nacional, quienes no solo valoran la calidad y viabilidad de las propuestas, sino también su alineación con los objetivos misionales del Ministerio. Esta dinámica debería establecer una conversación directa y frontal entre el Ministerio y lxs distintos gestores y compañías culturales, con el propósito de impactar los territorios de manera contextualizada.

Participar en esta convocatoria es una oportunidad para articular esfuerzos en el sector cultural. Sin embargo, es fundamental reconocer que, aunque el presupuesto asignado al sector ha alcanzado cifras históricas en los últimos años, aún es uno de los más pequeños y susceptibles a recortes según las consideraciones gubernamentales. Por ejemplo, en 2024, el presupuesto fue de $1,47 billones de pesos, el más alto en la historia del Ministerio, sin embargo, para 2025, se aprobó un presupuesto de $1,09 billones, lo que representa una reducción del 18% respecto al año anterior, aunque sigue siendo el segundo más alto en la historia del sector.

«Aunque el presupuesto asignado al sector ha alcanzado cifras históricas en los últimos años, aún es uno de los más pequeños y susceptibles a recortes según las consideraciones gubernamentales»

Al comparar estos montos con los de otros ministerios, la diferencia es notable. Por ejemplo, el gasto militar de Colombia en 2023 fue de aproximadamente $10,7 mil millones de dólares, lo que equivale a más de 40 billones de pesos colombianos, superando ampliamente el presupuesto destinado a cultura. es.statista.com

Esta situación evidencia la necesidad de exigir al país un presupuesto pertinente y recíproco para el arte y la cultura, reconociendo su valor como motor de paz, economía y cohesión social. La cultura no solo enriquece nuestra identidad, sino que también contribuye al desarrollo económico y a la construcción de una sociedad más equitativa y en paz.

Es importante entender que los «estímulos», como su nombre lo indica, buscan incentivar, pero no financiar completamente las propuestas. Por ello, es esencial que las iniciativas cuenten con un nivel de autogestión que permita su implementación efectiva en el territorio. La diferencia entre realizar una actividad aislada y desarrollar un proyecto cultural integral radica en la planificación y ejecución de múltiples acciones coordinadas que buscan un impacto sostenido en la comunidad.

Desde Mano Negra S.C., basándonos en nuestra experiencia, recomendamos las siguientes estrategias de autogestión:

  • Inversión Propia: Al igual que en otros emprendimientos que requieren inversión en infraestructura, mobiliario o personal, un proyecto cultural demanda que el gestor o grupo líder disponga de recursos para su desarrollo. Esta inversión debe ser acorde al contexto y a las expectativas a corto y mediano plazo, pudiendo provenir de ahorros personales o préstamos bancarios de libre inversión, siempre y cuando se considere que el proyecto es serio y requiere decisiones financieras responsables.
  • Cadenas de Ahorro Comunitario: Una estrategia ancestral utilizada por nuestras ancestras es la «Cadena», donde varias personas se reúnen para realizar un ahorro programado y recibir por turnos el cúmulo de los aportes grupales. Esta es una práctica autogestionable y solidaria que puede ser de gran ayuda para los gestores culturales.
  • Crowdfunding: El financiamiento colectivo es una buena opción si se desarrolla una estrategia efectiva de comunicación y una adecuada retribución a los aportantes. Es fundamental crear una narrativa atractiva que conecte con potenciales donantes y ofrecer incentivos que motiven su contribución.
  • Alianzas Estratégicas: Dependiendo de las actividades del proyecto, es conveniente establecer alianzas con instituciones que puedan aportar recursos o facilitar el acceso a públicos diversos. Por ejemplo, en un proyecto que requiere la presentación de una obra teatral infantil, podría ser beneficioso aliarse con teatros para garantizar una programación variada, con colegios para incentivar el acceso al arte de niños y niñas, y con juntas de padres de familia para articularse a sus necesidades e intereses.
Edd Londoño y Natalia Izquierdo en "El viaje de Yuitima" dir: Juan Pablo Astudillo. foto: FunBarba
Edd Londoño y Natalia Izquierdo en «El viaje de Yuitima» dir: Juan Pablo Astudillo. foto: FunBarba

«Es importante que artistas y gestores desarrollemos estrategias complementarias de financiamiento pues esto aumenta la probabilidad de sostenibilidad de sus proyectos y contribuirá al enriquecimiento y diversificación del panorama cultural colombiano.«

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